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La edición de 2016 del All-Star Game será recordada no sólo por haber sido la primera en realizarse fuera de Estados Unidos (la sede fue Toronto, Canadá), sino por haber sido la última protagonizada por Kobe Bryant. Así se dirigía Kobe en dicha carta, tratando de tú a tú al deporte que le dio todo. Oak Hill venció 79-78, pero LeBron se llevó toda la atención, inclusive de los muchos ojeadores de la NBA y de las universidades que había en el pabellón. La eterna rivalidad Celtics-Lakers se convirtió en un clásico de las finales de la NBA. «Querido baloncesto.». Con estas palabras comenzaba el cinco veces campeón de la NBA con la franquicia angelina su carta de despedida publicada el 30 de noviembre en una conocida web norteamericana.

Sólo uno de los dos pudo acabar el domingo con una sonrisa. Ese All-Star Weekend fue la última vez en la que Kobe participó de otro evento que no sea el partido del domingo. Contribuyó en su primera temporada con 18 puntos por partido con un 51,6% de acierto en tiros de campo, y 6,2 rebotes, mostrando una calidad inusitada para su edad. En 2013, cuando aún lucía la camiseta oro y púrpura, empezó discretamente una aventura en el mundo del venture capital con inversiones en el sector de tecnología, medios y datos con el emprendedor Jeff Stibel. El 13 de abril de 2016, Kobe Bryant puso fin a su exitosa carrera de 20 años en el baloncesto vistiendo por última vez la camiseta de los Ángeles Lakers, la que siempre defendió. Sin fallar ningún intento de pase o tiro, Kobe fue el más rápido de la primera ronda, pero en la final se complicó con el pase de pecho y perdió frente a Dwyane Wade.

Nada mejor para hacer frente a los mosquitos en el hogar que una mosquitera magnética como esta. Kobe recibió una presentación especial, al margen de todas las demás súperestrellas de aquel All-Star Game, con el famoso rapero Drake presente en el escenario. Sólo Jordan (nueve veces) y LeBron (actualmente siete veces) fueron los más elegidos más veces que Kobe (Julius Erving y Vince Carter también lo lograron en cuatro ocasiones). Después de ese encuentro, D-Wade declaró: «Un día tendremos el privilegio de decir que jugamos contra uno de los más grandes en la historia del básquetbol, Kobe Bryant». Será un fin de semana de sensaciones especiales el que se avecina en Chicago, con la celebración del básquetbol mezclada con un dolor por la pérdida de Kobe y Gianna Bryant que aún no se va.

Se decidió que el último cuarto, en lugar de jugarse de forma clásica a 12 minutos, se disputará hasta un determinado puntaje. Además, Kobe estará presente hasta en el reglamento del partido del que tantas veces fue elegido MVP. Kobe disputó una buena parte de este partido de 2012 con su nariz rota, luego de un golpe de Dwyane Wade durante el tercer período. A ese número objetivo se llegará sumándole 24, por Kobe, a la cifra que llevaba el equipo que iba ganando el partido hasta el final del tercer cuarto. Primero Pau se posteó contra Kobe, pero a pesar de la ventaja de altura, el catalán falló su tiro.